Liverpool protagonizó un aburrido encuentro en Alemania válido por Europa League en que no pudo sacar ventajas ante un defensivo y ordenado (no por ello superior) equipo de Augsburg.
Los "reds" se plantaron con un 4-3-3 inicial, idéntico al que se utilizó ante Aston Villa. Esta vez, se tomaron menos riesgos desde el comienzo y cuando el rival decidió atacar, el esquema cambiaba por momentos a un 4-4-2 para retener hombre a hombre el sistema clásico de Ausburg con dos líneas de cuatro.
Los intentos de contragolpe de Liverpool comenzaron a desvanecerse rápidamente debido a la inconsistencia de los delanteros (tónica de todo el encuentro). Sturridge se vio demasiado inactivo y poco participativo; por su parte, Firmino no tuvo buen día frente al arco.
No hubo conexión entre mediocampo y ataque
Muy poco fue lo que creo el medio, en especial durante la primera parte. Aun cuando en el segundo tiempo el equipo avanzó y empujó al rival hacia su propio campo, intentando centros desde el sector derecho con James Milner, lo que crearon Emre Can y Jordan Henderson fue nulo.
Aquí es donde las alternativas parecen pocas, estando Lucas Leiva disponible, un hombre de corte defensivo y Joe Allen lesionado; incluso si el galés estuviera disponible, no parece haber un hombre que sea capaz de arrastrar rivales y dar pases filtrados con eficacia más allá de Coutinho (quién se ubicó todo el encuentro recostado sobre la izquierda).
El rival no fue capaz de concretar sus oportunidades.
No es un tema menor. Augsburg tuvo mejores llegadas que Liverpool. Lo que ocurre es que no fueron concretadas y la mayoría fueron desperdiciadas de manera increíble. El poco tiempo dentro del campo de Raúl Bobadilla, eje central del ataque de los alemanes, hizo cambiar la idea de juego de los locales.
El paraguayo-argentino dejó sin opción de gol a su equipo tras su lesión y el brasileño Caiuby (reemplazante) no fue ni la sombra.
Lo cierto es que el Augsburg no sabe concretar sus oportunidades y lo ha demostrado en la Bundesliga. Esto puede ser un punto a favor nuestro pero nunca puede fiarse el Liverpool, ni menos cuando en el partido de revancha los alemanes seguramente jugarán de contragolpe y usarán al coreano Ji como arma letal. Un gol de la visita sería un serio problema.
Moreno: ¿Lateral o volante?
Como último punto importante, he decidido mencionar a Alberto Moreno. El desempeño del español fue bueno y malo al mismo tiempo. Sabemos desde hace tiempo que su afán por atacar es incesante pero su habilidad para defender deja muchísimas dudas. Si bien, sus incursiones generaban peligro e incluso tuvo un gran remate de distancia, lo que hace en el otro arco es inaceptable.
El sevillano cometió tres errores garrafales (más que cualquier otro jugador en el partido) que terminaron en clara ocasión de gol.
No es primera vez que esto sucede, cuando no se ubica correctamente en su posición, cuando no regresa a cubrir su zona, cuando no marca, ni hace el esfuerzo por marcar a quién enviará un centro y en especial cuando no despeja bien de cabeza y deja el balón en medio del área (en vez de rechazar hacia afuera como lo indica el manual).
He aquí un rival doblegable y varias veces menor al Liverpool en calidad y presupuesto. Los "reds" solo deben jugar creativamente y aprovechar las ocasiones en Anfield porque el partido en Alemania estuvo más que ganable.
You'll Never Walk Alone